Nuestros vecinos del norte hacen muy buen cine. Hay a quién no le gusta porque cuenta historias cotidianas y muy cercanas. A mi me encanta. Y en las series de TV de un tiempo a esta partem hacen obras completas y complejas que analizan la realidad de su país y de su sociedad de una forma que genera una envidia nada sana. Esta serie del año 2023 es un buen ejemplo. Dirigida por Xavier Giannoli y Frédéric Planchon nos relata con la sinceridad y un ritmo agil dentro de la complejidad de la trama, un caso real de fraude al Estado francés basado en el IVA del mercado de CO2 generado al albor de las buenas intenciones contra el cambio climático que señala sin miedo los límites y la complicidad, por activa y por pasiva, del mismo en la falta de escrúpulos y regulación de los mercados.

Protagonizada por un siempre colosal Vincent Lindon, en el papel de un magistrado de aduanas y con un excesivo Niels Schneider, perfecto para el papel que le corresponde, como el reflejo de lo grotesco del capitalismo financiero y sus terminales delictivas.

Dos temporadas que, como sucedió anteriormente con productos televisivos como Baron Noir o más recientemente con La fiebre, hacen una radiografia de las interioridades de la sociedad francesa mostrando una imagen esclarotizada de su clase política y de su élite. En el caso de Baron Noir mostrando la imagen más real nunca rodada de las interioridades de la política partidista y con La fiebre, los peligros de una sociedad polarizada y mediatizada por los nuevos canales de comunicación. 

El fraude que muestra esta serie, conocida como “la estafa del siglo”, logró malversar cientos de millones de euros procedentes del IVA de la compraventa de cuotas de emisiones de CO2 –el ‘derecho a contaminar’ que unas empresas adquieren de otras cuando quieren superar los límites de polución asignados por la UE–. Esta medida, auspiciada y celebrada por gobiernos y empresas, buscaba reducir las emisiones globales de gases invernadero y resultó un fracaso absoluto debido a la desregulación, la falta de previsión de las brechas del sistema y la pésima colaboración institucional e internacional para evitar impunidad de los estafadores.

Una maravilla de serie para disfrutar y de paso pensar.

Óscar C.